sábado, 28 de junio de 2008

oda a ti



cuando corro
junto
a la estampida
y no oigo ni siquiera
a mí mismo
porque el ruido
de la vida es muy fuerte
y los silencios
se ahogaron
en la piedra;
y los versos
se perdieron en el tiempo;
y las piernas
se acortaron en
el viaje;
y las penas se
comieron las
sonrisas;
y las lluvias
se olvidaron
de los pobres;
y los muertos
se quejaron de
la muerte,
apareciste,
tú,

arte de magia,
arte de gracia,
volumen
cuerpo
masa hermosa
cabellos, humo,
pared terrible
gigantesca estatua
monumento eterno
a detenerme
a detenerme de golpe
acariciándome,
desavaneciéndome,
desdibujándome
desorientándome
y quedé allí
quedé así
estirado
acostado
dormido
loco, molusco,
crustáceo
me hice mar
me hice sol
y dejé solo mi cuerpo
lo abandoné para
siempre
porque me fui, me fui
y me fui
a recorrer tu alma
y a vivir en ti.